10/07/2018
Lourdes Cartaya Otamendi es educadora en Diabetes, tiene un máster en nutrición, y es miembro de la Asociación de Diabéticos de Madrid.
Lourdes Cartaya Otamendi es educadora en Diabetes, tiene un máster en nutrición, y es miembro de la Asociación de Diabéticos de Madrid.
Lourdes nos habla de la importancia de controlar los alimentos que se consumen y llevar hábitos de vida saludables en el tratamiento de la Diabetes Tipo 2.
Los hábitos alimenticios juegan un papel muy importante en el desarrollo de la Diabetes tipo 2.
Las personas que tienen malos hábitos alimenticios por lo general presentan sobrepeso y obesidad, estando ambas condiciones relacionadas con la resistencia a la insulina ligada a la enfermedad.
El aumento de la prevalencia de la obesidad como resultado de hábitos de vida sedentarios, está forzando un dramático aumento de los casos de DT2 en el mundo entero.
La DT2 se desarrolla en la mayoría de los pacientes por una ingesta excesiva de calorías en aquellos individuos susceptibles.
Conocemos que el riesgo de desarrollarla en el individuo adulto con un índice de masa corporal mayor de 30 kg/m2 es cinco veces superior al de una persona con un índice dentro de los valores considerados normales.
Las personas en riesgo de presentarla se benefician altamente con pérdidas modestas de peso, tal y como ha sido demostrado en numerosos estudios, y es allí donde una alimentación saludable y la práctica de actividad física de forma regular son esenciales para prevenirla.
"Los hábitos alimenticios juegan un papel muy importante en el desarrollo de la Diabetes tipo 2 (DT2)."
El riesgo a desarrollar DT2 también aumenta con la edad. Igualmente ocurre con más frecuencia en las mujeres que han presentado diabetes gestacional y personas con hipertensión e hiperlipidemia.
Uno de los primeros abordajes terapéuticos de la DT2 es un plan de alimentación saludable, reforzando los buenos hábitos y proponiendo alternativas para aquellos hábitos menos saludables, de manera que junto a la actividad física le permitan perder peso y así reducir la masa grasa corporal y disminuir la resistencia a la insulina.
Para muchos pacientes una dieta saludable y la práctica de ejercicio de forma regular son suficientes para conseguir el control metabólico.
Para que la terapia nutricional sea exitosa requiere de la educación del paciente y que integre estos cambios de hábitos de vida.
De la misma manera, el plan de alimentación debe ser individualizado de acuerdo al juicio clínico, las preferencias y necesidades individuales de cada paciente y con un correcto seguimiento.
La dieta o plan de alimentación para personas con Diabetes tipo 2 es prácticamente la misma que se le recomienda a la población en general para mantenerse saludable.
La dieta Mediterránea es una excelente opción como lo demuestran diferentes estudios, así como utilizar el “método del plato saludable”, como herramienta para lograr un plato equilibrado.
El "método del plato saludable" consiste en una sencilla y útil guía destinada a planificar sus comidas, que permite controlar el tamaño de las raciones de los alimentos ricos en carbohidratos, almidón, minerales, fibra y vitaminas, así como de aquellos que son bajos en carbohidrátos y calorías.
Para la persona con diabetes es importante conocer los alimentos que aportan hidratos de carbono y controlar la cantidad que consume de acuerdo a las recomendaciones dadas por su equipo de profesionales sanitarios de manera que pueda lograr un buen control glucémico.
Las sociedades científicas recomiendan evitar el consumo de productos especiales para personas con diabetes. Son altos en grasas y por tanto en calorías, y pueden tener efecto laxante si se consumen en exceso.
Una alimentación saludable junto a la práctica de actividad física de forma regular y el tratamiento farmacológico indicado, ayudan a normalizar los niveles de glucosa en sangre y a mantener la diabetes bajo control.
Para cualquier duda sobre diabetes, consulte siempre con su profesional sanitario.